Unas 33 organizaciones del sector conformaron este jueves la Plataforma Nacional para la Sostenibilidad del Café (Nicafes), espacio con el que pretenden compensar la ausencia de una entidad rectora que bajo una visión común de sus integrantes oriente los esfuerzos y recursos necesarios para garantizar la sobrevivencia de esta actividad.

La plataforma trabajará en la elaboración de un diagnóstico productivo que identifique los obstáculos que enfrenta la producción y su impacto económico y social.

 

“El diagnóstico se va a realizar en Matagalpa, Jinotega y Nueva Segovia, y la idea es tener un panorama del sector. También se realizará otro estudio que analizará el marco jurídico, gobernanza e institucionalidad del sector para determinar lo que funciona y lo que no, y a partir de eso hacer recomendaciones”, detalla Aura Lila Sevilla Kuan, presidenta de la Alianza Nacional de Cafetaleros de Nicaragua (ANCN) y del comité de Nicafes.

Realizarán diagnóstico

A partir de los resultados del diagnóstico productivo, se tendría que actualizar el Plan Nacional de Transformación y Desarrollo de la Caficultura, que ya está desfasado, para luego impulsar su ejecución.

Aunque de momento las 33 organizaciones que integran la plataforma pertenecen al sector privado —productores, cooperativas, empresas exportadoras, proveedores de insumos, organizaciones de apoyo y académicos—, el gran reto es incluir a las instancias gubernamentales vinculadas a la actividad.

La plataforma funcionará a través de un comité coordinador integrado por representantes de cada uno de los sectores que conforman la plataforma, detalla Fausto Rodríguez, del programa de sostenibilidad de Rikolto, que es una de las organizaciones que financia la plataforma.

Concentrar esfuerzos

El principal reto de Nicafes es la unificación de todos los esfuerzos que desde instancias públicas y privadas se desarrollan en torno a la caficultura. Esto solo podrá lograrse a través de la consolidación del diálogo público-privado, dice Juan Francisco Martínez, representante en Nicaragua de UTZ, organismo que financia la plataforma.

Fuente: La Prensa