Costa Rica elabora una guía que busca fomentar las “Ferias del Agricultor” en América Latina, con el objetivo de acercar a los clientes a un espacio de comercialización de los productos frescos y de calidad que ofrecen los agricultores locales.
El Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) indicó en un comunicado de prensa que las investigadoras María Fernanda Jiménez, Marianella Gamboa y Laura Brenes trabajan en la “Guía para establecimiento de ferias del agricultor eficientes: prácticas exitosas para ligar sistemas agroalimentarios saludables con dietas urbanas más sostenibles”.
El documento es realizado a petición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y pretende funcionar como un manual mediante el cual los demás países de la región latinoamericana puedan tomar el ejemplo de Costa Rica y establecer en ellos estilos de mercados similares.
“La calidad de los productos es muy buena. Hay que reconocer que el Estado sí trabaja por los productores y consumidores, ya que la legislación los obliga a tener productos de calidad, sea donde sea”, dijo Jiménez. Las ferias, que datan de finales de los años 70, son avaladas y respaldadas por la legislación nacional costarricense, lo que permite que los beneficios para vendedores y compradores estén garantizados en varios aspectos.
Entre las fortalezas que las investigadoras han logrado identificar están relacionadas con la cercanía que existe entre el productor y el cliente, la calidad del producto y su frescura. “Entre los aspectos evaluados destacan las razones de comercialización, preferencia de los consumidores por este mercado y no otros, calidad del producto, disponibilidad, precio y cercanía”, detalló Gamboa.
Según el Consejo Nacional de Producción (CNP) en Costa Rica existen cerca de 80 ferias del agricultor, que se realizan cada fin de semana en distintas comunidades de todo el país.
La realización de este proyecto inició en enero pasado y se espera que el manual sea entregado en noviembre. Luego los resultados serán publicados por la FAO.
Fuente: El Nuevo Diario