Dirigentes del sector ganadero confían en que los acuerdos alcanzados por representantes de las autoridades de Agricultura y Comercio de El Salvador con sus homólogos nicaragüenses, garanticen la fluidez de las exportaciones de leche y derivados lácteos locales a ese mercado.
Esto evitará que se concreten las amenazas de paralizar las vías anunciadas recientemente por los productores.
El lunes una delegación nicaragüense —encabezada por el titular del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific), Orlando Solórzano; el director ejecutivo del Instituto de Protección y Sanidad
Agropecuaria (IPSA), Ricardo Somarriba, y el director ejecutivo de la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (Canislac), Óscar López— visitó El Salvador.
Horas de negociación
Tras horas de negociación con funcionarios del vecino país se establecieron algunos acuerdos que según el titular del Ministerio de Agricultura salvadoreño, Orestes Ortez, facilitarán el comercio intrarregional y garantizarán la inocuidad de los lácteos nicaragüenses que ingresen a ese mercado.
“Consideramos que después de estos acuerdos los flujos comerciales se van a normalizar. Queremos que los productores se sientan tranquilos y que sepan que se está trabajando en función de que las relaciones comerciales con ese país se mantengan”, sostiene el presidente de Canislac, Willmer Fernández.
A mediados de julio, el Ministerio de Agricultura y Ganadería de El Salvador anunció que para “beneficiar” al sector lácteo su país implementaría —a partir de septiembre— más de treinta requisitos para la importación de leche y derivados lácteos nicaragüenses, principalmente queso.
Algunas de estas medidas eran nuevas, pero otras simplemente endurecían la aplicación de las existentes. Y aunque en ese momento se dijo que estarían vigentes a partir de septiembre, en los últimos días de julio las autoridades de ese país comenzaron a poner trabas a la entrega de permisos de importación de queso.
El momento de la crisis
Para la primera semana de agosto, según Canislac, dichas trabas habían entorpecido el envío de al menos cuatrocientas mil libras de queso a ese mercado, que absorbe la mayor parte del queso que se produce en el país. Eso agudizó la crisis que desde hace varios meses enfrentan los productores. La sobreproducción, típica de la temporada lluviosa conocida como golpe de leche, elevó la oferta y redujo hasta en 50 por ciento el precio, que en promedio pasó de diez a cinco córdobas por litro.
Ante esta situación los productos se reunieron con representantes del Gabinete de Producción y advirtieron que de no establecerse una mesa bilateral de negociación entre ambos países, paralizarían las vías de acceso a las zonas productivas e incluso las cercanas a los puestos fronterizos para impedir el ingreso de productos procedentes de El Salvador y Honduras. Este último país mantiene cerradas sus fronteras a la leche y derivados lácteos nicaragüenses desde hace casi dos años.
Según Fernández, afortunadamente las autoridades locales lograron que se instalara la mesa de negociación, que permitirá entre otras cosas garantizar la fluidez del comercio de lácteos.
En el encuentro del lunes, el ministro Ortez, junto con representantes del Ministerio de Economía prometieron considerar la ampliación del plazo para la entrada en vigencia de algunos de los nuevos requisitos sanitarios y de etiquetado.
Asimismo, continuarán negociando la aplicación de otros requisitos referidos al empaque y embalaje, además de mantener un diálogo permanente entre las autoridades de ambos países en busca de la homologación de criterios y procedimientos para el ingreso de los lácteos a ese mercado.
Expectativas de Faganic
Por su parte, el presidente de la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (Faganic), Álvaro Vargas, confía en que ahora que se estableció el diálogo con las autoridades salvadoreñas, se encuentre una solución similar para resolver el cierre que mantiene Honduras desde hace casi dos años a la leche y lácteos locales.
También espera que se continúe en la búsqueda de soluciones a los problemas de mercado, pago de impuestos, precios bajos y otros que enfrentan los productores de leche a nivel local.
Buscan opciones
Mientras se buscan soluciones a los problemas que enfrentan la leche y los derivados lácteos locales para ingresar a los mercado vecinos, la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (Canislac) busca opciones de diversificación de la oferta exportable del sector.
“Una de ellas podría ser la elaboración de quesos madurados que tienen una vida útil más larga y llegan a nichos de consumidores de alto valor adquisitivo. Esto elevaría los ingresos de los productores y ampliaría los mercados de exportación y las oportunidades del queso local”, dice el presidente de Canislac, Willmer Fernández.
Para impulsar la elaboración de este tipo de queso un especialista uruguayo imparte esta semana en Nueva Guinea, un taller en el que incluso, participan representantes del sector lácteo de todos los países de Centroamérica, ya que según Canislac, la elaboración de este tipo de queso podría ser una alternativa para resolver muchos de los problemas que enfrenta el sector.
Fuente:La Prensa