Además de la sequía y la crisis sociopolítica que enfrenta Nicaragua, ahora los productores también tienen que lidiar con la caída en los precios internacionales de los principales productos de exportación, los cuales se están comprando por debajo de los costos de producción y les ha generado pérdidas millonarias.

Los productos más afectados son el café oro, el azúcar de caña y la carne de bovino; estos tres rubros suman 867.2 millones de dólares, de los 1,895.5 millones de dólares que se captaron entre enero y agosto de este año por exportaciones.

Hasta agosto pasado los precios internacionales en veinte productos exportables se redujeron un 5.7 por ciento por cada kilogramo exportado con respecto a igual periodo del año pasado, revelan estadísticas del Centro de Trámites de las Exportaciones (Cetrex).

El presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua (APEN), Guillermo Jacoby, explica que los precios están por debajo de los costos de producción, situación que se agrava debido a que dada la crisis el sector está sufriendo una fuerte restricción del crédito.

“Como no hay financiamiento no se están comprando los insumos y como no se están comprando los insumos agrícolas necesarios, se espera que el impacto para el año que viene en la producción sea fuerte. Mi preocupación no es este año sino el próximo, cuando se verán las consecuencias”, dijo Jacoby.

Estadísticas del Cetrex indican que ocho de veinte productos de exportación sufrieron una caída en los precios internacionales hasta agosto, entre los cuales están: el café oro, carne de bovino, azúcar de caña, maní, aceites y grasas, ron, ganado bovino y banano.

Café y azúcar en picada
En el caso del café oro, el volumen de las exportaciones de enero a agosto se redujo 2.7 por ciento, mientras que en valor la caída fue de 14.4 por ciento, debido a una reducción en el precio internacional.

Aura Lila Sevilla, presidenta de la Alianza Nacional de Cafetaleros, sostuvo que la situación es crítica, porque en el ciclo pasado (2016-2017) ya se operaba con pérdidas, las cuales se han incrementado en este ciclo (2017-2018).

“El café ha caído por debajo de los cien dólares el quintal y los costos mínimos de producción andan entre 120 y 160 dólares, es decir que en promedio estamos perdiendo cuarenta dólares por cada quintal de café producido, eso nos preocupa porque ya estamos iniciando la cosecha y por el problema de financiamiento no podemos esperar los precios a futuro porque nos tenemos que refinanciar”, expresó Sevilla.

Este jueves el quintal de café se cotizaba en 96.40 dólares en los mercados internacionales.

Además del precio internacional, este año la sequía afectó las plantaciones, provocando una maduración prematura del grano de oro. Esto a su vez preocupa a los caficultores, quienes temen que se genere un rebrote de roya.

Azúcar golpeado
Otro de los rubros afectados es el azúcar de caña, que hasta agosto con respecto al mismo periodo del año pasado el precio disminuyó un 12.8 por ciento, explicó Mario Amador, gerente general del Comité Nacional de Productores de Azúcar (CNPA). Este jueves el azúcar en el mercado mundial se cotizó a futuro en 11.68 dólares el quintal.

“Esta caída de precio se debe a que una sobreproducción en la India, por efecto de un subsidio que están recibiendo los productores de la India de parte de su gobierno. El gobierno indio ha estado otorgando cien dólares por tonelada de azúcar producida, eso ha incentivado el crecimiento de la producción y está haciendo que se cree un desbalance en la oferta exportable”, explicó.

El costo de producción por quintal de azúcar se estima entre 20 y 21 dólares, el doble de lo que pagan los mercados internacionales. Pero también debido a la sequía se espera dejar de producir un millón de quintales en azúcar de caña. A esta afectación provocada por la escasez de lluvia que hubo entre junio y julio, que son los meses de mayor crecimiento de la caña, hay que sumarle que el contexto actual no es el más favorable, pues los créditos bancarios están paralizados.

Sequía afecta producción
Mediante el Sistema de Índice de Estrés Hídrico en la Agricultura (Asis, por sus siglas en inglés), se ha demostrado que una gran zona de Nicaragua, una parte de El Salvador, Honduras e incluso Belice tienen problemas de estrés hídrico en los cultivos, explicó Berta Olmedo, secretaria ejecutiva del Comité Regional de Recursos Hidráulicos (CRRH).

Olmedo explicó que la herramienta trabaja con imágenes satelitales, y por medio de algoritmos se conoce si hay cultivos enfermos, si esto es así, se asocia con que no llovió lo suficiente, explicó.

Bajo un pronóstico de predominio del fenómeno meteorológico El Niño para finales de 2018, El Salvador y Guatemala tienen alertas por sequía; sin embargo, Nicaragua no se ha referido al tema, y mientras tanto, el Gobierno asegura que las lluvias han sido buenas.

Fuente: La Prensa